Alcalá de los Gazules se desenvuelve en torno a un bastión elevado, sobre una topografía extrema, asomándose con vértigo al horizonte desde los bordes de su núcleo histórico hasta donde llegan las estrechas e inclinadas calles. Esta propuesta se construye a partir de una idea clara: la de ofrecer a los ciudadanos de Alcalá́ un espacio completamente plano, horizontal, situado a media ladera del nuevo parque de la ciudad. Un lugar que resuelva los problemas existentes y al mismo tiempo cree nuevas oportunidades para la comunidad. Una base, una estrategia para el futuro, un desencadenante de dinámicas equilibradas.
ANALISIS
Llegar a esta propuesta de ordenación del borde Norte de Alcalá́ de los Gazules ha requerido un análisis de comprensión del lugar, de sus principios y componentes fundadores. Era necesario evaluar las preexistencias y encontrar los argumentos de soporte para construir la esencia del proyecto: Es fundamental transformar, una reclamada transformación, pero también lo es poner en valor las características originales de este fenomenal paisaje. Ordenar este trozo de territorio es articular paisaje y ciudad, crear vínculos entre el paisaje deseado y el existente, arbitrando encuentros y solapes.
TOPOGRAFÍAS/LÍNEAS DE AGUA
La topografía original es utilizada como base de trabajo y casi sin alterar su estado El área de intervención está situada en la ladera Norte del núcleo de Alcalá́ de los Gazules, caracterizada por una topografía abrupta que se pliega sobre una línea de escorrentía alineada con Plaza de San Jorge, y que llamaremos a partir de ahora el “eje vertical”. Este pliegue es una de las características que creemos fundamentales a la hora de aproximarnos al solar, ya que permite la visión cruzada desde ambos extremos, concentra la tensión de la transformación sobre dicho eje, lo que permite establecer una relación directa con el centro urbano, y ofrece diferentes exposiciones a lo largo del recorrido. La diferencia de cota máxima en el terreno es de 70 m, coincidiendo con el eje vertical.
En la parte alta, donde se encuentra con el borde urbano existen algunos escarpes acentuados que hacen complicada la relación con el terreno.
En el extremo Este, bajo la ladera del castillo, se han ido colonizando espacios para uso agrícola creando estructura de aterrazamientos y edificaciones que pueden llegar a ordenarse dentro de la propuesta del futuro parque. Un poco más abajo, en su contacto con el cementerio existe una zona plana con un gran potencial para la propuesta.
En la parte baja, el terreno está definido por un camino rural que baja hasta la vega. Conforme baja, las pendientes se moderan y el espacio se hace más accesible, Esta es una zona que permite la construcción en el tiempo de un jardín de carácter forestal.
En la parte Oeste, el terreno natural golpea sin control las últimas edificaciones sueltas. Es un lugar complicado que requiere una intervención quirúrgica delicada para conseguir coser los diferentes ámbitos que vierten sobre el, entre otras cosas porque debe resolver un grave problema de accesibilidad rodada. Esta es además la zona en el que se pretende situar un aparcamiento subterráneo, pero desde nuestro punto de vista, no nos parece el lugar apropiado para introducir dicha sobrecarga, y la propuesta ha tratado de buscar una clara alternativa.
VEGETACION EXISTENTE:
Situado en pleno centro de la provincia ofrece un paisaje diferenciado, entre una zona alomada de cerros y vegas y las sierras incluidas en el Parque Natural de los Alcornocales. Rodeada de un precioso paisaje desde su fortaleza, se dominan amplias vistas de Los Alcornocales y de la campiña de Cádiz. Mágico lugar situado al sur de la Sierra de Grazalema donde se encuentran los mejores bosques naturales de alcornoques de toda Andalucía. El valor biológico que posee esta zona es incalculable, y por supuesto viene dado por los bosques de alcornoques acompañados de matorral de tipo mediterráneo. Se encuentran también en la zona otras especies de Quercus como el quejigo y la encina; también algarrobos y acebuches de cientos de años. En los “canutos” la diversidad de especies vegetales es tal que se consideran como auténticos bosques subtropicales y aquí́ aparecen rododendros, laureles, avellanos, acebos, alisos, junto con innumerables helechos que tapizan el valle. En la zona de intervención cabe destacar la existencia de algunos ejemplares maduros organizados en torno a tres ámbitos diferenciados: Por un lado, en la parte alta, en su contacto con el borde urbano, aprovechando los desmontes y las aguas del casco urbano, por otro en la zona del eje vertical que es más húmeda por la configuración del terreno, y por último a lo largo del camino de bajada que hace de límite natural a la parcela.
NÚCLEO URBANO:
Emplazado en un cerro sobre el valle del Barbate, Alcalá́ de los Gazules con una superficie de aproximadamente 479m2, de origen romano, es una bella ciudad con una arquitectura andaluza en la que contrastan el trazado y desnivel de sus empinadas calles con plazas amplias y luminosas, una luz especial y otros tantos ingredientes como el verde de los alcornocales que lo circundan. Declarado “Conjunto Histórico-Artístico”, este núcleo posee extraordinarios edificios barrocos, neoclásicos, eclécticos y de arquitectura popular, como el Castillo, la muralla, la Iglesia Mayor de San Jorge o el Convento de Santo Domingo.
Todo el conjunto edificado se sitúa detrás del ámbito de intervención, dejando de esta forma las vistas abiertas hacia un paisaje de extrema belleza sobre
Insertado en la ruta de los pueblos blancos tiene un gran potencial para el desarrollo turístico, pero como tal y como establecen las bases es necesario resolver problemas básicos de infraestructura que permitan avanzar hacia un modelo sostenible, entre los que destaca el problema de accesibilidad y aparcamiento de visitantes y residentes.
CRITERIOS ESTRUCTURADORES DE LA PROPUESTA
Es importante saber leer y encontrar buenos indicadores como base de proyecto, eso significa entender y bien interpretar el contexto del ámbito de actuación. A qué puntos importantes podemos acogernos para desarrollar la propuesta, cuestiones colocadas desde un principio.
ACCESOS Y CIRCULACIÓN:
Existe un grave problema de accesos al núcleo histórico de Alcalá́ de los Gazules, derivado fundamentalmente de las forzadas pendientes y la estrechez de las calles. El problema es mayor si cabe en tanto no existe un criterio claro de que hasta donde llegar, y qué hacer con los coches una vez allí́. Resolver el problema del acceso es también establecer criterios claros sobre la movilidad y aportar soluciones alternativas que permitan sobrepasar la inercia construida históricamente. Es por ello que la propuesta no pretende construirse sobre una única visión sobre el tema. Más bien al contrario, intenta sentar las bases para permitir una flexible reorganización de las maneras de moverse en el municipio a lo largo del tiempo.
Desde el punto de vista de los accesos al municipio parece claro que la existencia de la Autovía Jeréz-Algeciras provoca un desequilibrio de la presión de los accesos hacia el Sur Este, mientras que la entrada histórica se producía en caracol alrededor del castillo en el sentido de las agujas del reloj. En cualquier caso, ambos recorridos llegaban a la zona sur del núcleo distribuyendo de forma precaria el tráfico hacia el interior. El concurso reconoce la necesidad de resolver el acceso de vehículos, incluido autobuses turísticos a la ladera Norte, lo que a nuestro juicio implica abrir un ramal que atravesando el ámbito de actuación conecte los dos extremos del pueblo a través de lo que denominaremos el Eje Horizontal. Está cierto que la conexión de este nuevo ramal con los circuitos de acceso son complicados en cualquiera de los dos casos, y que superan el ámbito de este concurso introduciendo complejos parámetros de gestión urbanística local, pero también lo es que una propuesta claramente integradora y flexible puede ayudar a desencadenar soluciones puntuales que de otra manera no tendrían inercia suficiente.
DIRECCIONES DE LA PROPUESTA:
Desde un punto de vista diagramático existen en el solar dos claros ejes que articulan el espacio, y que casualmente corresponden con las líneas que conectan los extremos de los vértices del solar. Los hemos denominado, a efectos de simplificación, Eje Vertical y Eje Horizontal.
El Eje Vertical es aquel que conecta los puntos topográficamente más alejados del terreno, desde la cota 130 en el vértice Norte a la cota 201 en el vértice Sur. Este eje es además una charnela entorno a la que se pliega el terreno, y además la continuación de la calle San Vicente, que conecta directamente con la Plaza de San Jorge. Este eje evidentemente no es accesible de forma natural, pero es un referente visual de máximo valor paisajístico, ya que permite una lectura muy directa de la dramática pendiente del terreno.
El Eje Horizontal es aquel que relaciona de forma plana los dos puntos más alejados del ámbito, la explanada del cementerio en el extremo Oeste con el nuevo acceso rodado en el extremo Este. La línea de topografía constante se sitúa entre la cota 170 y 175m de altura, y permite introducir una doble circulación (mixta en la parte superior y peatonal en la inferior), con un mínimo impacto sobre la topografía existente.
ÁMBITOS DE LA PROPUESTA:
Basados en la relación de estos dos ejes, la propuesta reconoce cuatro grandes ámbitos de trabajo que requieren de tratamiento y soluciones específicas:
Urbano, en contacto con el tejido construido consolidado, que requiere de una ordenada cualificación de la secuencia de espacios que lo conforman.
Forestal, que se organiza en la parte central del terreno, sobre la topografía existente y que es consolidado como lugar de esparcimiento y pulmón para la población turístico, que, situado en el extremo Este, en una gran explanada y que permitirá́ a los visitantes aparcar antes de acceder al pueblo. Una serie de equipamientos se dispondrán en esta zona con objeto de dar servicio a las nuevas necesidades (alquiler de bicicletas, quioscos, etc.…) Local, en la parte Oeste, en el cruce de caminos y tejidos que debe resolverse de forma que permita mantener con naturalidad la identidad de los caminos y las edificaciones dispersas que han salpicado la ladera, integrándolas en una estructura de recorridos y vegetación.
En el centro de estos cuatro grandes ámbitos, coincidiendo también con el cruce de los dos ejes, se propone un equipamiento lúdico-cultural asociado a un gran elevador que conecta la cota 170 (donde se dispone el paseo intermedio inferior) con el borde urbano en su intersección con la calle San Vicente, en la cota 200.
DISTRIBUCIÓN VEGETAL
La vegetación propuesta es el reflejo de un análisis florístico, de una preocupación con el paisaje natural y de una intención de sensibilidad hacia un paisaje transformado. Tenemos varias zonas de intervención, alto, medio, intermedio y bajo. En la zona alta surge una masa densa de vegetación, un pequeño bosque frondoso sobre talud entre el borde urbano y el ‘paseo’, con riego automático estrictamente controlado; en la zona media toda el agua de escorrentías superficiales se direccionarán hacia allá́ con lo que permitirá́ aportar un determinado caudal de agua sin mucha manutención. La zona intermedia es la que envuelve las plazas de aparcamiento de buses y junto al cementerio, y en la baja se pretende una actuación mínima de poca vegetación, de árboles más aislados. Uno de los grandes objetivos es seguir manteniendo el mismo ecosistema del lugar en la zona del parque para no perder su carácter, para esto se proponen especies existentes y autóctonas como los alcornocales, acebuches, quejigo y encinas, matorrales mediterráneos, así́ como intentar repoblar con semillas de poblaciones cercanas. Para el borde urbano sería interesante proponer árboles ornamentales que no existan en grande número por la ciudad, de forma a equilibrar las especies introducidas. Empañándolos caminos o senderos, se destacan cipreses esbeltos que van marcando la sinuosidad del trazado.
ORDENACIÓN
La propuesta es una extensión del tejido urbano y al mismo tiempo una preservación del ámbito natural y su ecosistema. El objetivo es hacer que aquel territorio sea más deseable que antes de la intervención, y también más comprendido y respetado. Es hacer que la gente de Alcalá́ y sus visitantes no lo miren desde el borde, sino que se introduzcan en su interior. Se trata de construir una nueva puerta a la ciudad a través del interior de la montaña, y al mismo tiempo convertir la montaña en parte de la ciudad. Una parte que antes no era de nadie y que con esta intervención será́ de todos.
Por otro lado, se trata de reducir la movilidad rodada en el Centro histórico reservándolo a los transportes urbanos y consagrando su carácter peatonal.
No se trata de sumar elementos autónomos (un borde, un parque, un aparcamiento, un equipamiento, etc.…), sino de crear un nuevo referente para Alcalá́ de los Gazules. Un lugar que se sume a su carga patrimonial, y la potencie. Que permita ser todos esos elementos cuando se necesiten y tantos otros que aún no han sido requeridos, pero aparecerán conforme vayamos apropiándonos de él.
La propuesta tiene tres ámbitos de intervención bien diferenciados:
Intervención en la zona Alta:
Reformula el perímetro del casco histórico como un límite entre dos espacios equilibrados, y no como una barrera. En esta zona la intervención presta especial cuidado al tratamiento de los dos bordes, el que contacta con las edificaciones y que se extiende hacia el interior buscando la Plaza de San Jorge, y el que contacta con el parque, abriendo perspectivas hacia el horizonte a través de las copas de los árboles y descendiendo en busca del plano horizontal intermedio. Esta pieza de cosido entre lo urbano y lo vegetal es coronada en lo que denominamos la plaza alta del elevador y está ordenada a través de un pavimento continuo que limita de forma sutil las zonas de aparcamiento y las integra dentro de un mobiliario urbano muy contenido que pone en valor la luces y las sombras, mientras abre miradas sobre el horizonte. El paseo cuenta con una zona de descarga de visitantes turísticos, de forma que los autobuses puedan utilizar la red de calles existentes en un solo sentido y puedan llegar a descargar en la plaza del elevador y seguir hasta la explanada baja donde esperarán a los viajeros.
Intervención en la zona Media:
Establece un nuevo soporte horizontal para uso y disfrute cívico. Esta es la pieza fundamental dentro de la estrategia de transformación, en primer lugar, porque descubre un gran espacio plano a una población que carece de el para múltiples apropiaciones públicas y privadas, y en segundo lugar porque lo hace resolviendo todos los problemas heredados con un impacto reducido sobre el terreno. La pieza que construye este plano está cuidadosamente diseñada para aprovechar cualquier ventaja que ofrece la topografía, equilibrando pequeños movimientos de tierra, descargando puntualmente sobre esbeltos apoyos y sacando partido a la geometría plegada de las laderas para reducir sus requerimientos estructurales. En cualquier caso, esta pieza es un organismo complejo, en el sentido que está preparada para asumir todas las funciones y usos que se requieran. En ese sentido tiene amplias zonas en la cota 175 para la circulación de vehículos, así́ como grandes áreas de aparcamiento (cerca de 200), pero también cuenta con un pequeño paseo inferior peatonal con varios equipamientos que se van abriendo a los distintos caminos del parque inferior. Se trata de introducir espacios polivalentes que, sobre vacíos multifuncionales para espectáculos de teatro, de música, para fiestas y ferias. Puntos de información turística sobre la villa y el territorio, actividades lúdicas, cafés y pequeños comercios, kioscos, locales de asociaciones vecinales, aulas externas para las escuelas y muchos otros programas sociales y culturales compatibles con el parque. Por tanto, la definición de este elemento ahora es la de un gran esqueleto capaz de soportar los usos varios, y plegarse a las necesidades de la población a lo largo del tiempo.
Intervención en la zona Baja:
Construye un parque natural sobre la base de la topografía y la vegetación existente. El tratamiento en esta zona está reducido a consolidar y completar una red de caminos incipientes a partir de intervenciones controladas de muros de contención, bancos y cauces, así́ como un controlado plan de forestación con especies autóctonas que terminen por construir un verdadero parque para el disfrute de un publico concienciado y sensible hacia los valores naturales.
PARQUE
Alcalá́ de los Gazules se encuentra en el corazón del Parque Natural de los Alcornocales. Condición suficiente para buscar un equilibrio en la forma de intervenir y un respeto por el entorno. La ladera Norte corresponde aparentemente a un sistema de soto-bosque de Alcornocal en el que se pueden encontrar varios tipos de combinaciones. La topografía existente es una gran característica del lugar con identidad muy propia por lo que se minimizó la transformación de su estado actual. Apenas se moldeó puntualmente de forma a encontrar una lógica de transformación con estructuras construidas en la intermediación del espacio urbanizado.
La estrategia de implementación es mantener el ecosistema existente y instalar una nueva capa vegetal del mismo tipo de sistema de vegetación y combinaciones como podrán ser Pistacia lentiscus, Cistus ladanifer, Cistus salvifolius, Crataegus monogyna, Rhamnus alaternus o Teucrium fruticans, Teline linifolia. La mejora del suelo con nuevas aportaciones vegetales, sobretodo autóctonas, viene a contribuir al enriquecimiento de una zona degradada. Creemos importante tratar de repoblar con semillas de las poblaciones cercanas para evitar que el proyecto suponga una intromisión genética en las poblaciones locales de estas especies. El parque se traduce en una dinámica que corresponde a la articulación de dos zonas diferenciadas, por un lado, una zona alta entre casco y el paseo intermedio, densamente vegetada a partir una gestión eficiente de riego; y por otro la zona baja, con exigencias de mantenimiento muy bajo donde el uso a recursos hídricos se hace de forma limitada buscando su propia autonomía a través de escorrentías superficiales aportadas por la topografía existente. Dentro de estas fácilmente localizaríamos una línea de agua donde la vegetación se presenta mas frondosa y desde esa línea se irá diluyendo esta masa hasta convertirse en arboles puntuales. Se tendrá́ en cuenta la selección de especies arbustivas y herbáceas poco exigentes. En esta zona bajo el paseo horizontal donde fluyen los caminos peatonales se explora la dualidad de su expresión sinuosa entre los árboles, pequeñas masas arbóreas acompañan estos recorridos reforzando su movimiento.
Cualquier elemento añadido tiene como condición adaptarse al máximo al terreno, al carácter físico del lugar, tierra que se quita es tierra que se repone en otro lugar. El sistema de recorridos sinuosos que acompañan la topografía pretenden acercar el ser humano al paisaje, a su riqueza y diversidad, generando espacios de ocio, paseos tranquilos, recorridos en bici, paseos a caballo. Un nuevo espacio verde creado para la gente del lugar, un parque con potencial para proporcionar una mejora en la calidad de vida de esta, un espacio implantado para disfrutar todo el año, para acompañar las dinámicas de la vegetación, las dinámicas del espacio.
VERSATILIDAD
Frente a soluciones autónomas a los problemas concretos existentes, proponemos un soporte genérico a los requerimientos futuros. La clave no obstante es la gestión de esta versatilidad. Un espacio como el que proponemos, que puede ser un día un gran aparcamiento turísticos y otro día una feria de libros antiguos, requiere una gestión de su uso, lo cual implica también una didáctica sobre su valor. Hacer esto, nos parece, es una buena inversión porque significa una mejor utilización por parte de los ciudadanos y por tanto un mayor disfrute de los recursos al tiempo que su mejor conservación. Proponemos por tanto un trabajo que empieza en la propuesta urbana pero que debe continuar en el ámbito de la gestión cívica, buscando programas que doten de sentido la nueva infraestructura, que la llenen de vida, que permitan nuevas formas de uso acontecer. Esta es la gran oportunidad que vemos, y que entendemos puede llegar a ser acordada por el pueblo.
SOSTENIBILIDAD
Un Parque es una estructura viva, y es también una estructura funcional y económica compleja. Estas dos imágenes están estrechamente relacionadas, no solo porque un sistema ecológicamente descontextualizado sea económicamente difícil, sino también porque una estructura ecológicamente compatible necesita de un soporte continuado, a través de acciones de mantenimiento, limpieza y seguridad. Proponemos una estructura basada en el equilibrio entre los costes de mantenimiento y rendimientos provenientes de la atribución de las concesiones (el huerto solar sobre los aparcamientos entre otros) y basada en costes de mantenimiento muy bajos.